La Diputada Rosa María Triana Martínez destaca la preocupación por el uso desmedido de dispositivos móviles en entornos educativos. Refiere experiencias de maestros que señalan distracciones comunes, como mensajes, música y compras en línea, afectando el proceso de enseñanza-aprendizaje. En el marco del reciente Informe de Seguimiento de la Educación en el Mundo de la UNESCO, se resalta la recomendación de prohibir smartphones en las aulas para preservar la concentración y evitar interrupciones.
Triana aborda la delicada balanza entre la propiedad personal, la privacidad y el rendimiento académico. Cita estudios que revelan que la presencia de dispositivos móviles puede desconcentrar a los estudiantes, requiriendo hasta 20 minutos para recuperar el enfoque en el aprendizaje. Datos de pruebas internacionales, como PISA, sugieren una relación negativa entre el uso excesivo de tecnología y el rendimiento estudiantil.
La Diputada subraya que varios estados en México ya trabajan en regulaciones para limitar o prohibir el uso de dispositivos tecnológicos en las escuelas. Destaca investigaciones en Bélgica, España y el Reino Unido que respaldan la mejora del rendimiento académico al prohibir el uso de teléfonos móviles en las aulas, especialmente para alumnos con bajo rendimiento. La conexión directa entre el uso excesivo del celular y el bajo rendimiento escolar, así como el impacto negativo en la estabilidad emocional de los niños, refuerza la necesidad de regulaciones efectivas.