En una sesión ordinaria del Congreso del Estado de Durango, la diputada Sandra Lilia Amaya Rosales, del partido Morena y presidenta de la Junta de Gobierno y coordinación política, hizo un llamado urgente para abordar la crisis de sequía que está afectando gravemente a la región. En su intervención, Amaya Rosales destacó que la sequía no solo está causando estragos en la agricultura y la ganadería, sino que también está impactando el suministro de agua para consumo humano y animal.
La diputada señaló que los 39 municipios de Durango están enfrentando una sequía extrema, con pérdidas significativas en la producción agrícola y ganadera. Más de 26 mil cabezas de ganado han muerto debido a la falta de agua, y aproximadamente el 90% de los cultivos están en riesgo. Ante esta situación, Amaya Rosales hizo un llamado a la unidad entre todas las bancadas del Congreso para dotar de recursos a las autoridades competentes y tomar medidas urgentes para abordar la sequía y la escasez de agua en el estado.
Como parte del punto de acuerdo presentado, se exhorta al titular de la Secretaría de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural, a la Comisión Nacional del Agua y a los sistemas operadores de agua potable de los municipios a tomar acciones concretas para mitigar los efectos de la sequía. Entre las medidas propuestas se encuentran la compra de químicos para la estrategia de bombardeo de nubes, la ampliación de la capacidad de almacenamiento de agua mediante la construcción de presas y represas, y la realización de obras hidráulicas para la captación y aprovechamiento del agua en áreas donde el acceso al agua es escaso.
Este llamado a la acción resalta la importancia de la colaboración entre los diferentes niveles de gobierno y la sociedad para enfrentar los desafíos ambientales que enfrenta Durango.